viernes, 16 de marzo de 2018

El largo brazo de la censura cubana

Hago constar que la pieza Reviva la Revolu ya está en España, pero la aduana y correos no me la quieren entregar.

Tras casi un año de gestiones en Cuba, logré sacar la tela de la isla por correo ordinario. Tres meses después llegó a Madrid, pero las autoridades españolas me exigen, para 
entregármela, una serie de documentos absurdos; como certificado de estudios, contrato de trabajo, recibos que demuestren que el contenido del paquete es mío, billetes de avión a Cuba de hace más de 6 meses y baja consular.

Les he explicado que soy cubano, con asilo político en España desde 1993 y que el gobierno castrista no me deja entrar a la isla por cuestiones políticas y que, por eso, deseo recuperar las pertenencias que me quedan en casa de mi madre, en La Habana; pero me responden con mensajes automáticos, que repiten una y otra vez las mismas arbitrarias peticiones, sin explicar sus razones. Les adjunté fotos de mi pasaporte, carné consular y residencia( NIE ); así como enlaces a numerosas publicaciones que mencionan la instalación Reviva la Revolu, de mi autoría, expuesta en Cuba en 1988 y desaparecida en el museo de bellas artes de La Habana durante 20 años; incluso les he autorizado a abrir el paquete; pero es cómo sí hablara con la pared o con un burócrata cubano.

Me niego a facilitar información a correos sobre mi estado laboral o nivel de estudios, si no me explican qué tiene que ver eso con recibir un paquete de mi madre. Todo esto me huele raro y, cuando está Cuba de por medio, no creo en las casualidades. Es muy posible que las autoridades cubanas estén ejerciendo algún tipo de presión para que devuelvan mi obra a la isla. Por eso quiero asesorarme legalmente sobre este caso, antes de hacer una denuncia o acudir a la prensa. Sí algún abogado o similar quiere ayudarme, puede escribirme a aldoaye@yahoo.es ó dejar sus comentarios en mi cuenta de Facebook.



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